Tour privado en Giverny y Auvers sur Oise desde París en un cómodo minibús

Descubra la casa de Monet y la última casa de Van Gogh en los magníficos pueblos de Giverny y Auvers-sur-Oise. ¡Las entradas para la visita a la casa de Monet y a la última casa de Van Gogh en Auvers-sur-Oise están incluidas!

VISITA DE GIVERNY Y DE LA CASA DE MONET

Situado a 80 kilómetros de París, Giverny es un encantador pueblo en las afueras de Isla de Francia en Normandía. Aquí es donde Claude Monet decidió residir y satisfacer su pasión por la pintura, la jardinería y la fotografía. Los jardines y la casa de Claude Monet fueron legados por su hijo Michel a la Academia de Bellas Artes en 1966.

Además de la casa, restituida tal como la habitaba el pintor, la visita incluye el taller del pintor y un paseo por el extraordinario jardín.

En la casa rosa, donde vivió de 1883 a 1926 Claude Monet podrá visitar:

• Planta baja: el salón azul (cámara de lectura), el taller, el comedor con la famosa colección des las imágenes japonesa en la parada, y la cocina de época.
• Primer piso: los apartamentos privados con la habitación de Monet (mobiliario de época) y la habitación de Alice y sus servicios. Delante de la casa, le encantarán los famosos jardines de Monet que representan una de las obras maestras del pintor.

La casa de Claude Monet suele estar abierta desde principios de abril hasta finales de octubre.

EL ENCANTADOR PUEBLO DE AUVERS SUR OISE

Tierra de inspiración para los pintores, como Vincent van Gogh, Camille Pissarro, Claude Monet, Charles-François Daubigny y muchos otros... todos dejaron aquí la huella de su gran genio artístico. El pueblo de Auvers-sur-Oise ha sabido conservado como patrimonio del gran movimiento artístico impresionista.

Vincent Van Gogh pintó setenta de sus pinturas en los últimos meses de su vida en Auvers-sur-Oise.

VISITA DE LA "RECAMARA DE VAN GOGH"

Descubra la última morada de Van Gogh en el albergue Ravoux en Auvers-sur-Oise. La habitación No.5, una modesta recamara iluminada únicamente por una lámpara de noche. Es aquí, que Theo van Gogh, asiste a los últimos momentos de su hermano Vincent.
Por superstición, "la recámara del suicida", pieza esencial del universo del pintor, nunca más ha sido alquilada. Este remanso de paz donde "no hay nada que ver... pero todo que sentir" ha permanecido intacto desde 1890. Vacío, no encontrará reliquia que tocar, aquí se entrar en contacto con la historia. En el mismo piso, la habitación No. 6 estaba ocupada por otro pintor menos famoso, Anton Hirschig. Su mobiliario, sencillo y sin fausto, evoca las condiciones de vida de un artista a finales del siglo XIX.

Este viaje en el tiempo termina en el ático del albergue con una presentación audiovisual, "Sur les pas de Van Gogh", que describe la estancia del artista en Auvers-sur-Oise a través de sus obras, su correspondencia y las fotografías de época. El montaje diseñado por Dominique-Charles janssens, presidente del Instituto Van Gogh, invita el espectador a descubrir Auvers-sur-Oise a través de los ojos y el talento de Van Gogh.